Por Armando de la Garza
La trayectoria de Lucía Méndez, una de las figuras más icónicas de la televisión mexicana, parece haber llegado a un estrepitoso declive. La actriz y cantante, conocida por sus papeles en telenovelas que marcaron época, enfrenta ahora un panorama desalentador: hace casi dos décadas que no consigue un papel significativo en la pantalla chica.
Empresarios del medio han señalado que su comportamiento como diva en el pasado ha sido un factor determinante para su actual situación. «Es muy conflictiva y se siente una chingona. Nadie la quiere contratar,» comentó una fuente cercana a la industria. Al parecer, las actitudes de Lucía durante sus últimos proyectos profesionales dejaron una impresión negativa, alejando a posibles colaboradores y productores.
Actualmente, Lucía Méndez se ha visto obligada a producir su propio espectáculo, que ha sido descrito como «deprimente» y que cuenta con un coro de baja calidad. Con 70 años, la actriz sigue intentando mantenerse en el ojo público, esta vez anunciándose como vedete, una decisión que ha generado críticas y desconcierto entre sus seguidores y detractores por igual.
A pesar de los desafíos, Méndez persiste en su esfuerzo por revivir su carrera, invirtiendo su propio dinero en este nuevo proyecto. El tiempo dirá si su apuesta logrará captar la atención del público o si, por el contrario, confirmará su irreversible declive en la industria del entretenimiento.
