Monseñor Hilario González expuso que son el corazón de toda familia y lamentó los tantos casos de violencia que se registran en contra de muchas de ellas.
por: Roberto Ortiz
En el marco del Día Internacional de la Mujer, el obispo Hilario González de la Diócesis de Saltillo emitió un llamado urgente a los varones para otorgar a las mujeres el lugar que merecen, siguiendo las enseñanzas divinas y reconociendo el valor y papel fundamental que desempeñan en la sociedad.
El líder espiritual expresó su preocupación por la lamentable realidad de la violencia que enfrentan las mujeres en diversos aspectos de sus vidas y destacó que, como el corazón de la familia, merecen recibir un trato de amor y respeto. González enfatizó que es triste observar cómo la violencia se expande incluso hacia niñas y abuelitas, subrayando la importancia de reconocer y valorar el papel que desempeña el sexo femenino.
En palabras del obispo, la mujer cumple un papel crucial como facilitadora en las familias, estableciendo lazos de cariño, respeto, desarrollo, educación y paz. Aunque, en ocasiones, los esposos pueden estar ausentes o menos comprometidos, son las mujeres quienes emergen para guiar y levantar a la familia. González resaltó que, al ser seres creados a imagen y semejanza de Dios, las mujeres poseen una dignidad que no deben perder.
El llamado del obispo no solo se dirige a los varones para que sean conscientes y eviten causar daño, sino también a las mujeres para que se sostengan en la espiritualidad de Dios, reconociendo que siempre tendrán un refugio al cual acudir. En un contexto donde la igualdad y el respeto son fundamentales, el obispo Hilario González destaca la importancia de un trato digno y amoroso hacia las mujeres en todos los ámbitos de la vida.
